A las venerables Abadesas, Prioras, Superioras, y demàs Religiosas : de nuestra filiacíon y obediencia...y sus Sabios y Prudentes Directores ordinarios y extraordinarios. Ya no podemos disimular mas la tristeza...Assegurandonos que por vuestra culpa y por medio de vagas prophecias, aprobadas por vuestros directores, se esparcen ideas contrarias a la quietud del estado...Dado en...Murcia a trece dias del mes de noviembre de mil setecientos setenta y siete. Diego. Obispo de Cartagena
