Juana Pallarés agradece a Óscar Esplá las palabras que éste pronunciara, en la Academia de Bellas Artes de San Fernando, como homenaje póstumo a su marido Ataulfo Argenta. Además menciona que antes de morir, Argenta estaba estudiando su "Sinfonía Aitana" para tocarla en Bruselas